Albert Rivera y las elecciones presidenciales en EEUU

Albert Rivera se ofrece como bisagra para que Hillary Clinton y Donald Trump puedan gobernar juntos en EEUU:

Por: Hermenegildo Señor Equis. 

La primera interacción mundial producida tras el primer milisegundo en que por escaso margen se hizo casi oficial que Donald Trump será el cuadragésimo quinto presidente de los EEUU fue el momento elegido por Albert Rivera para telefonear al magnate y proponerse como parte imprescindible en un futuro gobierno de coalición con su, hasta ese momento, adlátere Hillary Clinton.

Una vez captada la atención de su interlocutor, el líder naranja se ofreció a mediar con la señora de Bill en un intento por evitar unas segundas elecciones en los Estados Unidos, siempre que el futuro líder se atuviera a una serie de condiciones indispensables “que vienen marcadas por tres puntos irrenunciables en nuestro programa, como son la investigación de las tramas de corrupción en Wisconsin, que los bancos americanos devuelvan el dinero del rescate, y un pequeño cargo de gobernador en algún estado a ser posible con costa. Pero vamos, que si no le gustan mis condiciones, a mí tampoco”, recalcó en su perorata el gran moderador de Ciudadanos, ya con los pantalones por los tobillos.

Una señorita muy amable que apareció de repente en el teléfono le advirtió de que su interlocutor había cortado la llamada hacía un rato, y era tontería estar pagando más conferencia, y Albert le ofreció entonces a la telefonista pactar con ella, de nuevo sin resultado positivo. Indestructible al desaliento, el gran líder naranja lo intentó también con Hillary, con idéntico resultado. Posteriormente, la telefonista le explicó que lo de las elecciones USA no siguen los mismos protocolos que las de España, por lo que la cabeza visible de Ciudadanos ha decidido dar un  tiempo a los resultados de las elecciones para ver la situación en la quedan Podemos y el PSOE, por si acaso. “Yo no pierdo la fe”, ha declarado con su mecánica sonrisa.